No olvida lo bien que se lo pasó en Wimbledon, y más aún si la final ante Djokovic fue legendaria. "Cuando gané me enamoré de la hierba. Ahora mismo, mi superficie favorita es la pista dura", ha reconocido el tenista español, que ha añadido que "probablemente, la arcilla sea la última para mí". 

Y es que se siente cada vez más seguro y confiado en sus movimientos en Flusinhg Meadows. Más cómodo cada partido que pasa. 

No dio opción alguna a Arnaldi, salvo en el segundo y tercer juego del último set. "Estoy muy contento de mi intensidad desde el principio hasta la última bola", se felicitó Alcaraz. "Jugué un partido sólido, con menos errores, haciendo mi juego, yendo a la red todo el tiempo. Estoy contento con mi actuación en general".

Ahora le espera en cuartos un duro rival, bien Zverev bien Sinner. "Sascha (Zverev) está jugando bien y Jannik (Sinner) también. Será un partido muy duro entre ellos, lo voy a ver seguro", avanzó Alcaraz en la pista. "No sé contra quién jugaré pero serán unos cuartos difíciles contra cualquiera".