El mejor XV de la historia de la Copa del Mundo de Rugby
1: Randt Bone
No es poca cosa para el puntal afrikáner. Aunque no es el único jugador que ha ganado dos Mundiales, lo hizo con 12 años de diferencia, convirtiéndose en el primero en lograr tal hazaña. Presente en 1995 para el renacimiento sudafricano, volvió a ser convocado en 2007 y puso fin a su larga carrera con una victoria en la final. Magnífico.
2: Keith Wood
Caprichoso y espectacular, el 'divino calvo' fue también un jugador de rugby increíble, que sin duda contribuyó de forma impresionante al desarrollo de la posición de talonador. Hay cosas que lamentar, incluido no haber tenido un equipo irlandés tan fuerte como el actual. Pero su reputación y su carrera fueron de la máxima calidad, con algunas actuaciones inolvidables.
3: Phil Vickery
Cuando se nombra capitán a un puntal, es porque tiene una ascendencia definitiva. Vickery llevó a la Rosa a la final de la Copa del Mundo de 2007, pero fue cuatro años antes cuando alcanzó su punto álgido como pilar de la melé de Inglaterra: un aburrida campeona del mundo, pero campeón del mundo al fin y al cabo.
4: John Eales
¿Un segunda línea con una longevidad extrema, un liderazgo indiscutible y que además sabe patear? Está llamado a ser uno de los mejores en su posición. Eales es uno de los doce jugadores de la historia que ha ganado dos veces la Copa Mundial, y simboliza la Australia triunfante de finales del siglo XX. Apodado 'Nadie', fue a buen seguro alguien.
5: Sam Whitelock
Dentro de dos meses, el All Black podría lograr una hazaña sin precedentes: convertirse en el primer jugador de la historia en ser tricampeón del mundo. Hace más de 13 años que abrazó el Helecho Plateado y es el último sobreviviente del título de 2011. Se hace mayor, eso está claro, pero su importancia es indiscutible.
6: Thierry Dusautoir
"El Destructor Oscuro" es firme candidato al título de mejor jugador de la historia que ha ganado un Mundial, aunque el favorito sea un extremo de los All Blacks. Su apodo se debe a su revelación de 2007, cuando explotó contra Nueva Zelanda con 38 placajes, lo que sigue siendo un récord en la Copa Mundial. Cuatro años más tarde, como capitán, llevó a los Bleus a un punto del título planetario. Y fue indiscutiblemente el mejor jugador del torneo. Agridulce.
7: Josh Kronfeld
La revelación de Lomu en 1995 casi eclipsó la explosión de otro All Black. Kronfeld, un lineman de tercera, corre como un extremo, placa como un centro y tiene una actividad sin igual. Durante dos ediciones reinó a campo abierto, sin coronarse campeón. La única mancha en una carrera deslumbrante.
8: Kieran Read
El símbolo de los All Blacks dominantes de la década de 2010. Ultrarregular, fue el seguro a todo riesgo de Nueva Zelanda en esta posición, en una tercera línea real con Richie McCaw en particular, que podría haber sido mencionado aquí. Pero el talento prima sobre el brazalete, y Read, mejor jugador del mundo en 2013, se ha ganado con creces su puesto.
9: Joost van der Westhuizen
El número 9 moderno, pero en los 90. Fuerte, vivo y realista, era el líder perfecto de los delanteros sudafricanos que dominaban en casa. Un auténtico símbolo, pero también una doble cara. Criticado por ser provocador e incluso acosar a los rivales, su reputación no era buena, pero su talento era innegable.
10: Jonny Wilkinson
Obviamente, este es el puesto en el que la competencia es más feroz, pero ¿por qué no incluir a Sir Jonny? Una carrera tan larga como un día, pero sobre todo un título mundial arrebatado casi en solitario en 2003, convirtiendo a Inglaterra en la primera -y todavía única- nación del Norte en ganar el título mundial. Siempre dispuesto, siempre en el centro del juego, es una leyenda.
11: Jonah Lomu
La leyenda. El hombre que puso (o volvió a poner) el rugby en el mapa deportivo mundial. Un fenómeno, un coloso de casi 2 metros y 100 kg, el más rápido sobre el terreno de juego. Pero también el más poderoso. Figura devastadora, dejó tras de sí una montaña de 'highlights', pero también una visión transformada de su deporte, ya que los jugadores más grandes se volvieron mucho más impresionantes tras su fallecimiento. Increíblemente, no fue campeón del mundo.
12: Tim Horan
Un hombre en la sombra. Pero increíblemente crucial para los dos títulos mundiales de los 'Wallabies'. La posición de centro está increíblemente infravalorada, pero es un puesto en el que se pueden marcar enormes diferencias. Y sus cualidades como golpeador le han mantenido en lo más alto durante diez años, además de llevar a su equipo a la gloria. Todo ello con gran clase.
13: Emile Ntamack
En el rugby 'moderno' se habla mucho de regular a los centros. Ntamack fue uno de los primeros en hacerlo. 'La Pantera Negra' era polivalente, un gran defensor, pero sobre todo decisivo. Su importancia en los éxitos de Francia, tanto en 1995 como en 1999, fue unánimemente aclamada en su momento. Y representa magníficamente a esta generación excepcional.
14: John Kirwan
Antes de Lomu, estaba Kirwan . No tan estelar, pero qué jugador al fin y al cabo. La estrella del primer Mundial de 1987. Un extremo superpoderoso cuyos compañeros sabían ponerle en el estado de ánimo adecuado para que su técnica y velocidad hicieran el resto. Fundamental.
15: Percy Montgomery
'Monty', o el hombre que forzó un cambio en la norma que prohibía a los 'Springboks' que jugaban en el extranjero jugar con la selección. Sudáfrica no quería quedarse sin semejante pateador, y bien por él, pues contribuyó a la victoria en 2007. Sigue siendo el máximo goleador de todos los tiempos de su país.
Suplentes :
Andrew Sheridan - Mario Ledesma - Martín Scelzo - Abdelatif Benazzi - Neil Back - Fabien Galthié - Shane Williams - Juan Martín Hernández.