Publicidad
Publicidad
Publicidad
Más
Publicidad
Publicidad
Publicidad

Cheika: "No fue el partido que queríamos y perdimos contra una muy buena Inglaterra"

AFP
Cheika tiene motivos para estar preocupado.
Cheika tiene motivos para estar preocupado.CLEMENT MAHOUDEAU / AFP
El seleccionador de Los Pumas fue claro a la hora de analizar el decepcionante juego que llevó a los argentinos a perder 27-10 contra un rival que se mostró muy eficaz este sábado en su primera aparición en el campeonato francés.

"Creo que dejamos que el juego se detuviera y se reiniciara demasiado. Inglaterra aprovechó muy bien las circunstancias y todo el mérito es para ellos", analizó en rueda de prensa.

"Prácticamente todo lo que podía salir mal, salió mal", sentenció el australiano tras seguramente la peor actuación de Los Pumas desde que el veterano técnico los dirige.

Michael Cheika, no obstante, trató de sacar hierro a la derrota: "El mundo no se ha acabado. Todavía tenemos chances para clasificarnos. Nuestros jugadores aprenderán mucho de esta experiencia. Tenemos muchos jugadores novatos en partidos de la Copa del Mundo y aprenderán una lección de cómo debemos estar preparados cuando llegue el momento".

Julián Montoya coincidió con su entrenador. "No fue el partido que queríamos y perdimos contra una muy buena selección de Inglaterra que hizo muchas cosas bien", dijo.

Argentina, muy superada por Inglaterra.
Argentina, muy superada por Inglaterra.CHRISTOPHE SIMON / AFP

"Rescato la actitud que tuvimos hasta el último minuto, que fue algo positivo", destacó respecto al try anotado sobre la bocina por Rodrigo Bruni y que sirvió para salvar el honor.

Montoya también señaló que "es el primer partido de un torneo largo". Además, comentó lo siguiente: "Tenemos que mejorar cosas rápido y pensar en lo que viene".

El capitán quiso "agradecer a los argentinos" que se desplazaraon a Marsella y a quienes les acompañan "desde sus casas".

Más crítico fue el fullback Juan Cruz Mallía, que apenas estuvo tres minutos en el césped, ya que recibió un golpe en la cabeza que le obligó a retirarse y que supuso la expulsión de Tom Curry, por lo que los ingleses jugaron 77 minutos en inferioridad: "Salimos a especular y eso no puede volvernos a pasar", declaró tras el partido, con un aparatoso vendaje en la cabeza.