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Piqué, el único central disponible para el Barcelona para los tres próximos partidos

Rafael Gómez
Xavi Hernández en la banda de Mestalla
Xavi Hernández en la banda de MestallaAFP
Las lesiones de Eric García y Jules Koundé generan incertidumbre en la última línea blaugrana. Xavi Hernández recurre de nuevo al ex jugador del Manchester United para suplir una baja. Marcos Alonso, segundo central ante las circunstancias

De lío en lío. Así transcurren los días en el Camp Nou. No ha pasado si quiera una semana desde la eliminación de la UEFA Champions League y el Barcelona recibió el sábado una dolorosa noticia: Eirc García (21) y Jules Koundé (23) están lesionados. 

Gacía, acorde a la información presentada por el club, sufrió molestias en el inguinal izquierdo. Koundé, por su lado, pidió el cambio después de presentar inconvenientes en el  bíceps femoral.

Ante los problemas físicos de sus centrales, Xavi recurrió, de nuevo, a Gerard Piqué (34). El canterano del Barcelona, que quedó retratado después de su error en el partido contra el Inter, recuperó un espacio en el once del entrenador de Tarrasa y, posiblemente, se mantendrá allí hasta el parón de noviembre. 

Además de Gerard Piqué, Marcos Alonso (31) es el otro jugador que ingresó para sustituir a sus compañeros lesionados. El lateral izquierdo completó una buena función como defensor central en algunos partidos. Su buena entrega y su velocidad le transforman en una variante importante para el cuerpo técnico. 

La enfermería culé

Con las lesiones de Eric García y de Jules Koundé aumenta la lista de jugadores con problemas físicos que descansan en la enfermería culé. El equipo de Xavi Hernández buscará soluciones en los próximos partidos. 

Ronald Araujo (23) intentará recuperarse para alcanzar el Mundial de Catar. Andreas Christensen (26) también hace lo propio para representar a Dinamarca en la cita de Oriente Próximo. 

El Barcelona tiene tres partidos por delante antes del parón de noviembre. Viktoria Plzen, Almería y Osasuna son rivales que, en teoría, no deberían ser problema para el Barcelona. Las lesiones, no obstante, ejercen presión en una plantilla reducida y golpeada, que espera revertir el curso de LaLiga a la vuelta de la pausa invernal ocasionada por el Mundial.