Luka Doncic y sus Mavs atraviesan uno de los momentos más complicados de los últimos tiempos. Tras una temporada anterior en la que exhibieron un gran nivel, quedando cuartos en el oeste y, posteriormente, llegando a la final de conferencia en la que cayeron contra los Golden State Warriors, a la postre campeones, la campaña 2022-2023 está siendo decepcionante para los texanos.

A las tres derrotas en sus últimos cuatro partidos, que les han relegado al noveno puesto en la clasificación con un balance de 14 victorias y otras tantas derrotas (el curso anterior acabaron con 52-30 en temporada regular), se le suma ahora la baja obligada de un jugador clave en la rotación del equipo entrenado por Jason Kidd.

Se trata de Maxi Kleber, que ya padeció un esguince de rodilla esta semana, pero que también sufrió una rotura en los isquiotibiales durante un entrenamiento del equipo el pasado martes, según anunciaron los Mavs. La franquicia de Dallas no ha detallado un tiempo de baja puesto que está "considerando opciones para el tratamiento", pero periodistas estadounidenses afirman que el alemán podría estar hasta dos meses de baja.

Kleber, importante pese a ser un habitual suplente, promedia esta camapaña 6,2 puntos, 3,5 rebotes, una asistencia y un tapón en los 25,7 minutos de media que juega cada partido. El germano, que firmó una extensión de contrato el pasado verano por tres años y 33 millones de dólares, tiene fama de especialista defensivo. Muestra de ello es que, con él sobre el parqué, a Dallas le meten 108,3 puntos por cada 100 posesiones, pero sin él la cifra se va hasta los 114,4.

La ausencia del exjugador del Obradoiro podría ser letal para los suyos, que han perdido cinco de los seis encuentros sin él que han disputado esta temporada, por lo que Doncic deberá multiplicarse (más si cabe) para que el barco que capitanea no se vaya a pique definitivamente.