El Inter aspira a alcanzar los cuartos de final de la Champions por primera vez en más de una década, por lo que no es de extrañar que no se precipitase en los primeros compases del choque contra un rival en plena forma. Lautaro Martínez y Hakan Çalhanoğlu tuvieron ocasiones para los locales, con un cabezazo mal despejado y un remate en el primer palo, pero las mejores oportunidades llegaron hacia el final del periodo.
Por parte del cuadro luso, Marko Grujić pagó el precio de haber preferido la potencia a la precisión en un disparo a bocajarro y vio cómo su disparo raso era atajado antes de que Galeno cabeceara fuera el rechace. Su guardameta, Diogo Costa, les sacó de apuros en el tiempo añadido de la primera parte con una magnífica parada de reflejos que dejó perplejo a un Alessandro Bastoni que no acertó a rematar de cabeza.
En la reanudación, el péndulo siguió oscilando de un lado a otro, y Nicolò Barella y Mehdi Taremi intercambiaron ocasiones. El impresionante guardameta del Inter, André Onana, maravilló a San Siro con una espectacular doble parada antes de que el Oporto recibiera un jarro de agua fría cuando el árbitro Srdjan Jovanovic le mostró a Otávio la segunda tarjeta amarilla por una entrada sobre Çalhanoğlu. Lukaku, recién salido del banquillo, aprovechó enviando al fondo de las mallas un balón procedente del rechace de su propio cabezazo que se había estrellado en el poste.
La victoria deja al Inter invicto en seis partidos y su entrenador, Simone Inzaghi, tiene todas las papeletas de eliminar a su excompañero y homólogo Sérgio Conceição en el choque de vuelta del 14 de marzo. El técnico del Oporto tiene su propia motivación para imponerse, ya que pasó dos temporadas con los nerazzurri en su época de jugador.
Jugador Flashscore del partido: André Onana.