A pesar de un triple-bogey en el par cuatro del hoyo 9 y otros dos bogeys, uno de ellos en el 18, Scheffler mantuvo una cómoda ventaja en Muirfield Village tras 54 hoyos.

El estadounidense está 10 bajo par en el torneo, cuatro golpes por delante de Collin Morikawa, el austriaco Sepp Straka y el canadiense Adam Hadwin, que están empatados en el segundo puesto con seis bajo par.

Morikawa y Straka ascendieron en la clasificación del sábado tras firmar ambos 68 golpes, cuatro bajo par, mientras que Hadwin, líder de la primera ronda, se mantuvo a la par con 72 golpes por segunda ronda consecutiva.

El recién coronado ganador del Campeonato de la PGA , Xander Schauffele, está a seis del liderato, con cuatro bajo par, después de una tercera ronda de 71 golpes, empatado en la quinta posición con el sueco Ludvig Aberg, que terminó con 72 golpes.

Sin embargo, los perseguidores se lamentan de no haber podido reducir la ventaja de tres golpes de Scheffler durante la noche.

El líder comenzó sin problemas con birdies consecutivos en el segundo y tercer hoyo, pero se encontró con el agua en el par cinco del tercero y terminó con un bogey seis.

Recuperó ese golpe en el hoyo siguiente con su tercer birdie del día, pero luego se vino abajo con un triple bogey en el noveno.

Tras salirse de los límites con su golpe de salida, lo que le supuso una penalización, Scheffler llegó al green, pero le quedó un putt largo para un doble bogey, que se le escapó y le supuso un triple bogey.

Eso dejó a Scheffler con uno más en la vuelta, ofreciendo un resquicio de luz a sus perseguidores, pero de manera típica, se reagrupó y embolsó tres birdies en la recta final antes de que un bogey cinco en el 18 le dejara uno por debajo para el día.

Scheffler reveló después que había mantenido la calma tras su pesadilla del triple bogey en el noveno hoyo.

"Estaba frustrado", dijo Scheffler. "Siento que no había pegado muchos golpes hoy fuera de línea y tenía un triple en mi tarjeta y de repente estaba uno sobre par.

"Definitivamente estaba frustrado con el descanso, pero en general estaba como, todavía estoy haciendo un swing muy bueno, no necesitaba cambiar nada, sólo tengo que permanecer en el estado de ánimo adecuado.

"Voy a salir mañana y tratar de tener una buena ronda de golf, mantener la cabeza hacia abajo y permanecer en mi propio pequeño mundo por ahí.

"No voy a prestar atención a lo que hacen los demás, sólo voy a intentar hacerlo lo mejor posible".

Sólido como el que más

El compañero de juego de Scheffler, Hadwin, quedó impresionado por cómo el número uno del mundo se había mantenido imperturbable durante una ronda que amenazó con deshacerse tras el triple bogey.

"Es muy sólido", dijo Hadwin. "Es el número 1 del mundo por algo, y está muy por encima del número 1 del mundo, creo, sobre todo después de verle hoy.

"No espero que pierda este torneo de golf, así que uno de nosotros tendrá que hacer una carrera mañana".

Hadwin advirtió sin embargo que los perseguidores de Scheffler tendrían que ser cautelosos.

"Es difícil ser demasiado agresivo en este lugar. Si lo haces, empiezas a perseguir birdies y llegarás a 80 antes de que te des cuenta".