Tras la cesión de cuatro de los más grandes clubes del campeonato el año pasado, otros seis serán puestos a la venta en agosto y otros ocho "en una etapa posterior", según un comunicado enviado el miércoles.
La Saudi Pro League cuenta con 18 clubes. Cuatro de ellos (Al Hilal, Al Nassr, Al Ahli y Al Ittihad) fueron comprados en 2023 por el Fondo de Inversión Público, el fondo soberano del reino petrolero.
Esta inyección de capital les permitió atraer a grandes estrellas como Cristiano Ronaldo, Karim Benzema o Neymar Júnior, con contratos espectaculares.
Los clubes sauditas, principalmente los cuatro que son propiedad del PIF, gastaron en fichajes casi 900 millones de euros en la ventana de 2023, situándose en segunda posición tras la Premier League.
Al Zulfi, Al Nahda, Al Okhdood, Al Ansar, Al Orouba y Al Kholoud han sido los elegidos para esta segunda tanda de privatizaciones en base a "su nivel de preparación operacional, su salud financiera y sus capacidades administrativas e instalaciones deportivas", precisó la institución pública.
La primera, la que dio pie a una auténtica revolución, provocó "un crecimiento significativo de los ingresos comerciales", añadiendo que el objetivo era ahora generar 480 millones de dólares (unos 444 kilos en euros) al año.
Según insiste el ministerio, la privatizacion se enmarca en los esfuerzos por "acelerar la transformación del sector de los deportes" en un país que busca reducir su dependencia del petróleo y mejorar su imagen internacional.