Un beso no consentido y un gesto obsceno han derribado más barreras que comisiones por Supercopas en Arabia Saudí, peleas con Tebas y otros dirigentes, pleitos judiciales,…La FIFA, tras su análisis e investigación, dice que Rubiales creó un “perjuicio irreparable” por su conducta en la final del Mundial femenino celebrada en Australia.
El diario El Mundo ha tenido acceso, en exclusiva, al expediente en el que se vuelcan las conclusiones del procedimiento abierto. Ese informe es el que utiliza el Comité de Disciplina de la FIFA para justificar la suspensión de 90 días al ex presidente de la RFEF.
En la redacción del mismo también se puede leer que lamenta que haya “empañado claramente el éxito” de la Selección, que se proclamó campeona del mundo ante Inglaterra así como el del propio torneo, ocasionando un daño “a nivel global”.
También se califica como “intolerable” que Rubiales presionara a Jenni Hermoso para que “declarase a su favor” cuando la bola de nieve empezó a hacerse cada vez más grande hasta resultar imparable.
“A la vista de cómo se desarrolló la Asamblea General de la RFEF y particularmente los comunicados -del sindicato- Futpro y de la jugadora, que contenían graves acusaciones contra Rubiales, queda justificada la adopción de medidas cautelares. Amenazar a la jugadora con medidas legales simplemente porque expresó su opinión sobre lo sucedido o, lo que es más grave, presionar a la jugadora y a su entorno, es intolerable y obstruye los procedimientos disciplinarios”, recalca el expediente.