Hugo Duro enciende la mascletá ante un Getafe con la pólvora mojada (1-0)
En plenas Fallas y con cierto aroma a mascletá, el Valencia afrontaba la vigesimoctava jornada de LaLiga EA Sports como una ocasión ideal para completar la fiesta y mantener vivo el sueño de regresar a competiciones europeas. Al otro lado del campo, el Getafe, que aterrizaba en Mestalla sin sus principales estrellas (Borja Mayoral y Mason Greenwood) y con la posibilidad de adelantar a su oponente en la clasificación.
Los 22 protagonistas salieron al césped con unas camisetas que incluían el siguiente mensaje: "Ánimo, Diakhaby". La afición también se acordó del central, lesionado de gravedad frente al Real Madrid y baja probable hasta 2025. Entretanto, la lluvia arreciaba y mojaba la pólvora de unos futbolistas algo apagados durante el tramo inicial. Sergi Canós la mandó arriba en el primer acercamiento y Juan Iglesias disparó sin demasiada potencia en la respuesta azulona.
Un 'Duro' petardazo
A pesar de que el cuero circulaba con fluidez, lo cierto es que el ritmo brilló por su ausencia debido a las múltiples interrupciones. Y eso que Luis Milla, cuyo padre jugó como local en la entidad del Turia, trató de iluminar constantemente a su equipo. Fue con el descanso acechando, en la recta final del primer tiempo, cuando Hugo Duro se inventó una magnífica vaselina ante la que nada pudo hacer David Soria. El movimiento de José Luis Gayà, que engañó a la zaga, sensacional.
Víctimas de la siempre molesta ley del ex por el gol del que fuera canterano, los madrileños salieron del vestuario con ganas de silenciar la pirotecnia: el delantero Jaime Mata amenazó en una jugada a balón parado, con oportunidad para Nemanja Maksimovic al rechace, y Juanmi Latasa probó fortuna desde el balcón del área. Sólo habían transcurrido cinco minutos y ya habían tenido un par de ocasiones para devolver la igualdad.
Tensión y nervios
Esas embestidas fueron en vano y, por momentos, se transformaron un espejismo. La llama del Geta se apagó de forma progresiva... hasta que volvió a cobrar vida tras un desafortunado patinazo de Cenk Özkacar que bien pudo traducirse en el empate. Del susto a la muerte hay sólo un paso... o varios centímetros: la falta de precisión de los atacantes impidió la definición ante Giorgi Mamardashvili, cuya intervención no fue necesaria.
Pero José Luis Bordalás agotó los últimos cartuchos en forma de cambios. Y recién ingresado en el terreno de juego, Óscar Rodríguez activó su cañón para provocar la excepcional estirada del guardameta georgiano, que la mandó a córner y volvió a ser decisivo en esa acción posterior gracias a una soberbia mano. De inmediato, Özkacar metió el pie en lo que parecía un remate cantado para los de la capital, que acumulan cuatro encuentros seguidos sin ganar.
Jugador Flashscore del partido: Mamardashvili.
Las estadísticas del choque están disponibles en Flashscore.