El adiós entre lágrimas de Saúl al Atlético de Madrid
Su próximo destino será el Sevilla, que le ha dado toda la confianza ofreciéndole un contrato de tres años de duración a pesar de que su rendimiento en los últimos cursos ha dejado mucho que desear. Tanto que de ser objeto de deseo de varios grandes de Europa, especialmente el Barcelona, e indiscutible en la selección española, pasó a un destierro forzoso en Inglaterra y a un regreso que no funcionó.
El Atlético hacía tiempo que quería quitárselo de en medio porque su rendimiento no se correspondía con su alta ficha, de las más altas, si no la que más, de la plantilla rojiblanca. Números de otra época.
Tras muchas semanas de negociación, finalmente ha habido fumata blanca y en breve se firmará el documento de rescisión. Saúl Ñiguez, al que le quedaban dos temporadas más, renunciará a parte del dinero que le correspondía cobrar aún, pero no a todo. El resto lo compensará con su nuevo contrato, mucho más bajo, en el Sevilla, pero que se extenderá hasta 2027.
Entre lágrimas
Este sábado ha acudido al Cerro del Espino, lugar donde el Atleti ha comenzado el trabajo de pretemporada, para despedirse de los que hasta ahora han sido sus compañeros y también del cuerpo técnico, con el que tuvo varios desencuentros en el pasado. Aquella decisión de Diego Pablo Simeone de ponerle de lateral zurdo fue el inicio del fin de Saúl en el Atlético.