El diario barcelonés había publicado que el precio de salida de Dembélé al PSG está fijado en 50 millones de euros (la mitad para cada una de las partes) en base a un contrato privado entre el Barcelona y el jugador, si Ousmane hacía saber al club barcelonista su voluntad de irse antes del 31 de julio, independientemente de lo que se estipulase en su cláusula de rescisión. 

El Barça, por tanto, poco podía hacer ante la existencia de ese acuerdo privado firmado con el jugador cuando éste aceptó renovar. En ese acuerdo, firmado por ambas partes, el Barcelona estipula aceptar su venta por 50 millones, de los cuales 25 serán para el Barcelona y 25 para Dembélé y sus agentes.

Como el jugador francés informó al Barcelona de su decisión de marcharse antes del día 31 de julio, el club catalán estaba obligado a aceptar su salida si algún club pagaba esos 50 millones. En estos momentos, en el Barça no esperan sacar más de la mitad de esa cantidad y se da el acuerdo por cerrado.

Ahora, sólo queda por saber cuándo se hará oficial el traspaso, algo que ocurrirá de forma inminente. Dembélé jugará en París las próximas cinco temporadas.