El encuentro ya se había suspendido dos veces durante la primera parte, una por el lanzamiento de bengalas al campo y otra por el lanzamiento de una copa desde la grada.

Un doblete de Santiago Giménez y otro de Igor Paixao habían dado al equipo de Rotterdam una ventaja sin precedentes en el Johan Cruyff Arena de Amsterdam.

Las imágenes de televisión mostraron tres bengalas encendidas sobre el terreno de juego y el humo de otras bengalas saliendo de las conocidas gradas sur del estadio, donde se sientan los hinchas más acérrimos del "lado F".

Según los medios de comunicación holandeses, la policía utilizó caballos y disparó gases lacrimógenos para dispersar a los aficionados que se encontraban fuera del estadio. Imágenes en las redes sociales mostraban a los aficionados en la entrada del estadio.

El Ajax ha tenido un pésimo comienzo de temporada. Tras ganar su primer partido, ha empatado dos y perdido uno en la Eredivisie. Actualmente ocupa el 13º puesto de la tabla.

En cambio, el Feyenoord, defensor del título, sigue invicto en la máxima categoría.