Tarde o temprano tenía que pasar. Ocurrió, lamentablemente para Colombia, en la final de la Copa América 2024, en el momento menos indicado para equivocarse. El invicto, la racha que parecía interminable. Las victorias ante Brasil, España, Alemania. La ilusión. Lautaro Martínez le puso fin a una racha de 28 jornadas. Un gol en la prórroga fue suficiente para darle a Argentina su segunda Copa consecutiva mientras que los dirigidos por Néstor Lorenzo regresan a casa con las manos vacías.
El invicto deja un sinsabor en los aficionados colombianos. Ganar 28 jornadas fue meritorio. Importante e ilusionante. El título, sin embargo, no llegó. Colombia vuelve a casa con una hinchada que ha esperado más de 20 años desde su último y único trofeo, la Copa América de 2001. La espera continuará. Es el momento de Argentina, la campeona del Mundo y la bicampeona de América que ha realizado un juego y un despliegue táctico interesante que anuló por completo a jugadores de la tricolor como James Rodríguez o Luis Díaz.
Un héroe inesperado
Las predicciones que aseguraron que Leo Messi iba a ser el héroe y la estrella de la final se han equivocado. El astro del Inter de Miami sufrió para superar la última línea cafetera en la primera parte. En la segunda se retiró por problemas musculares y por unas dolencias en el tobillo después de una entrada de Santiago Arias.
Lautaro Martínez, el mejor en el ataque de Argentina en la Copa América, llegó a cinco goles en la presente edición del torneo continental, convirtiéndose en el máximo anotador de la albiceleste.
Lautaro Martínez ingresó al terreno de juego en el 96'. Aunque pasó poco tiempo en la cancha, fue determinante: aprovechó una mala salida de la selección colombiana y marcó a placer el único gol del encuentro. Su anotación llevó a la albiceleste al bicampeonato. Un trofeo que deja muy buenas sensaciones de cara al Mundial de 2026.