Entrevista Flashscore | Menotti: "El fútbol sigue siendo un hecho cultural en mi vida"
Pregunta: ¿Dónde te encuentras ahora mismo? ¿Estás en Rosario?
Respuesta. No, vivo en capital. Tengo una escuela de entrenadores, sigo viviendo en Buenos Aires. A Rosario voy a pasear, a comer con mis amigos.
P: El fútbol sigue jugando un papel importante en tu vida...
R: El fútbol sigue siendo un hecho cultural para mi vida, me enseñó a aprender de todo. La fama del futbolista si la empleas bien te lleva a conocer grandes músicos, grandes periodistas, grandes poetas. El fútbol para mi ha sido un lugar que me desarrolló como hecho cultural, que no quiere decir leer a Borges. Quiere decir estar cerca de la realidad.
P: ¿Qué es lo que te ha aportado el fútbol que más te ha servido en la vida y que te queda como recuerdo?
R: Uno empieza a entender lo que significa del fútbol cuando empieza a escuchar la relación afectiva entre la pelota, el jugador y la gente. Eso se traslada a la historia de las casacas. Cada casaca por más que no sea el Barcelona o el Madrid tiene una historia relacionada a un hecho cultural. Te permite la libertad de ser vos mismo.
Recomponer relación entre futbolistas, entrenador y afición
P: ¿Qué recuerdo guardas de tu paso por España en el Barcelona y el Atlético de Madrid?
R: La posibilidad de relacionarte en un mundo que es difícil y la alegría de la representatitividad cuando eres entrenador del Barcelona o del Atlético de Madrid.
P. ¿Cómo ves la actualidad del Barça de Xavi?
R. Ha vivido un momento de confusión y creo que, teniendo a alguien que conoce la historia del Barcelona como jugador, es posible que recomponga esa relación entre la gente, los futbolistas y el entrenador, que estaba medio ausente. Todos los que están ahora mismo en el Barcelona son grandes jugadores, aunque el club no tenga una figura como fueron en su momento Messi, Maradona o Cruyff.
P: ¿Ves a Bellingham preparado para estar entre los más grandes de la historia?
R: Las condiciones las tiene pero hay que competir y vivir las situaciones de compromiso que te genera la representatividad de vestir la camiseta de ese club. Hay jugadores que aparecieron para responder a la falta de los grandes que hubo en el mundo del fútbol desde Di Stéfano o Kubala para delante. El mundo del fútbol está difícil, cambiado, confuso...No es fácil. Antes lo importante era LaLiga, luego la Copa. Yo siempre recuerdo las dos finales de Copa que ganamos con el Barcelona al Madrid. Es un mensaje de alegría que no olvidas más, ganar la Copa del Rey y la Copa de la Liga.
"Di Stéfano era bravísimo, siempre se quejaba"
P. ¿Qué recuerdos tienes de esos duelos contra el Madrid?
R: Al otro lado estaba Di Stéfano. Alfredo era bravísimo, siempre se quejaba, siempre tenía excusas, era bravo. Ese mundo del fútbol ojalá se sostenga. Siempre se vivía desde un respeto por el juego, por ese hecho cultural de la representatividad, que tiene la casaca del Barcelona. Es entender que te estás poniendo una casaca que ha representado la alegría, el compromiso de una sociedad, son clubes con muchas fuerza de representación. No es solamente la pelota y el domingo.
P: ¿En qué notas que ha cambiado no sólo la vida del futbolista sino el deporte en sí?
R: Yo creo que ha cambiado la sociedad, hay un mundo de urgencias, el sólo hecho de representar a un club como el Barcelona o el Madrid es inolvidable y se ha perdido eso. Antes una casaca de esas era un carné de reconocimiento. Si habías jugado en el Barcelona, ibas a un restaurante, había un ex jugador, lo reconocían, lo respetaban y lo condecoraban como si estuviese jugando todavía. Me ha tocado la época de ver con qué cariño el hincha que quiere al Barça lo reconocía.
P: A veces se queja la gente en Barcelona de falta de garra, de intensidad, por parte de algunos jugadores.
R: Tenemos que empezar a reconocer que hay una profunda desculturización en la sociedad. En el fútbol pasó hace mucho tiempo. Yo como entrenador del Barcelona entraba a un lugar, jamás me pidieron un autógrafo pero me saludaban como si hubiese nacido en Barcelona y no es que había ganado diez campeonatos. Hay que tener cuidado porque a veces el mundo de los negocios devora esa relación. Tienes que tener conciencia de lo que estás representando, no sólo de que te vaya bien en el resultado. Yo me siento muy feliz de la relación que he tenido con los futbolistas.