Entrevista exclusiva con Panenka: “Podría haberme ido a España y ganar más dinero”

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Entrevista exclusiva con Panenka: “Podría haberme ido a España y ganar más dinero”

Entrevista con Panenka: “Podría haberme ido a España y ganar más dinero”
Entrevista con Panenka: “Podría haberme ido a España y ganar más dinero”Profimedia
Se hizo famoso con la camiseta de la selección checoslovaca gracias a un inolvidable penalti en la final de la Eurocopa de 1976. También desbordaba alegría futbolística por los cuatro costados en el Rapid de Viena, por el que abandonó Checoslovaquia a principios de los ochenta. Por aquel entonces, Antonín Panenka (74) también era pretendido por el Murcia, al que estuvo a punto de marcharse por las buenas condiciones de la oferta.

Pero había una trampa. Panenka ya tenía entonces 32 años, ya que antes el régimen comunista no permitía a los futbolistas salir al extranjero. Él no creía que pudiera competir a su avanzada edad: "Ir a jugar con 32 años a un sitio donde básicamente no te conoce nadie... La información sobre los jugadores de entonces no era como la de ahora, nadie se interesaba por nuestra liga, no jugábamos copas", dice en una entrevista exclusiva para Flashscore echando la vista atrás más de 40 años

En el invierno de 1980, el Murcia buscaba refuerzos para luchar por la salvación. Se fijó en el centrocampista creativo del Bohemians: "Allí hubiera ganado mucho más que en el Rapid. Me lo planteé, pero existía el peligro de que el club no pudiera mantener la categoría y los primeros en estar en la rampa de salida eran los extranjeros", explica Panenka, para quien el descenso habría supuesto el fin de su compromiso y, por tanto, un regreso forzoso y anticipado a la Checoslovaquia socialista. 

Él no quería arriesgarse a eso: "Además, la liga española es muy difícil, tiene más nivel que la alta competición de nuestro país. Probablemente lo hubiera pasado muy mal allí", piensa. Juzgó la situación con la precisión de un cirujano. Efectivamente, el Murcia descendió esa temporada; él, mientras tanto, participaba en el renacimiento del Rapid de Viena. Al año siguiente, después de 27 años, les ayudó a conquistar el título -¡con 13 goles como centrocampista!- y a alcanzar la final de la Recopa de 1985, donde cayeron 3-1 ante el Everton y fue suplente.

Después de todo, sin embargo, jugó en España. Llegó allí con la camiseta de la selección checoslovaca en 1982 para disputar el único Mundial de su carrera. Marcó los dos goles que su combinado consiguió allí, ambos de penalti. No recuerda el mal campeonato, en el que el entonces el vigente tercer equipo del viejo continente fracasó estrepitosamente contra Kuwait (1-1): "Las expectativas eran altas, pero el clima general en el equipo era malo. Además, fuimos quizá el único participante del campeonato que cambió a todos los jugadores de la plantilla, con un portero distinto en cada partido", recuerda.

Popularidad en España

Sin embargo, se ha ganado una gran popularidad en el país ibérico. Sus filigranas simplemente asombraban a los aficionados y su legado perdura al otro lado de los Pirineos hasta nuestros días. Hay un programa de radio llamado ‘Panenkitas’ en su honor, e incluso una revista llamada ‘Panenka’: “Por supuesto, es un gran honor para mí. Hace un par de años me llamaron desde España unos jóvenes periodistas que querían hacer un nuevo estilo de revista de fútbol y eligieron mi nombre para ella. Me quedé muy sorprendido porque pensé, ¿cuántos años he estado fuera del juego? Además, ¿se ponen en contacto conmigo desde España, donde tienen probablemente a los mejores jugadores del mundo y eligen a alguien de la República Checa?", se pregunta.

Cuando preguntó a los autores de la idea sobre su origen, se enteró de que no se trataba sólo de su penalti de Belgrado: "También toda mi carrera, de la que lo sabían todo. Era tan inspirador que mi nombre fuera la elección única para su innovador proyecto. Eso me hizo muy feliz y acepté", explica Panenka. De forma similar, también dio su nombre a un restaurante madrileño que lleva su apellido: "Supongo que en España les caigo bien", sonríe.