El Sevilla y el Rayo firman un justo 1-1 en Vallecas en un partido emotivo para Suso
Si existe un equipo que sabe cómo disputar partidos cerrados ese es el Sevilla. El equipo Andaluz parece encontrarse con una nueva versión. El trabajo táctico de Jorge Sampaoli empieza a dar frutos: la defensa vuelve a ser la gran fortaleza. Los balones aéreos ya no son un dolor de cabeza. Las transiciones rápidas fragmentan a los contrarios.
El Sevilla, precisamente, solventó un inicio complicado de partido resguardándose en su propia área. El Rayo salió en tromba en el amanecer del encuentro. Los primeros 15 reflejaron una realidad: Vallecas se comía a los hispalenses. La agresividad, la tenacidad y la potencia física de los madrileños hacían temblar las piernas de los dirigidos por Sampaoli.
Los remates de Camello (22) y de Fran García (23) inquietaron a un Bono (31) que, como en Catar, ha mostrado calidad, experiencia y concentración. El portero marroquí evitó que el Rayo se adelantara en el marcador.
El Sevilla resistía incómodo las embestidas del Rayo cuando una buena acción colectiva del centro del campo hispalense tomó por sorpresa a una defensa que, en general, expone un gran funcionamiento.
Una desconcentración permitió un avance libre de Suso (29). El centrocampista remató al arco con fuerza. El balón, sin embargo, sufrió un desvió. Óscar (28) modificó la dirección de la pelota. El cambio de rumbo dejó a Dimitrievski sin opciones de contrarrestar el disparo.
Suso festejó en el minuto 25 un tanto que vale oro: después de dos años y dos días volvió a encontrarse con el gol. El antiguo extremo del AC Milán vivió una serie de problemas físicas que, sin duda, limitaron su rendimiento físico.
Sampaoli poco a poco recupera a jugadores como Suso y, además, le ofrece a los aficionados hispalenses un esquema organizado que no deja espacios.
La primera mitad finalizó con el 0-1 favorable para el Sevilla. Los andaluces salían a los vestuarios con un marcador extraño. En la segunda parte la historia efectuó un giro particular.
El inicio del segundo tiempo fue similar al primero: pocas opciones de gol. Juego directo de lado a lado. La pelota trancada en la mitad del campo. Ese era el partido que quería el Sevilla. Es un club que conoce a la perfección el sistema sin balón. Es la huella de Sampaoli.
El Sevilla jugaba cómodo con la pelota. El Rayo, cansado de tanto circular el esférico y de no encontrar profundidad, optó por los balones aéreos.
Así como una desconcentración le otorgó al Sevilla el primer gol, un error defensivo le entregó a los rayistas el empate.
Lejeune (31) aprovechó el fallo sevillista y puso las tablas en el marcador. El gol, por fortuna para los aficionados, animó el encuentro. El final del duelo fue de infarto. Acciones de uno. Respuestas del otro. Sampaoli envió kilometraje al ataque con Lamela (30) Jesús Navas (37) y Brayan Gil (22). Iraola no se quedó atrás y apostó por Unai López (27), Ciss (28), Raú De Tomás (28) y Falcao (37). El colombiano, precisamente, por poco marca el segundo rayista de no ser por otra intervención de Bono.
Al final, el partido concluyó con un empate que transmite buenas sensaciones. El Rayo no se quedó atrás ante uno de los aspirantes para Europa. El Sevilla demostró que se está reencontrando con su máximo nivel y que aún tiene esperanzas en medio de una temporada atípica.
Jugador del partido Flashscore: Suso. El centrocampista volvió al gol dos años y dos días después y realizó una gran exhibición en Vallecas.