Publicidad
Publicidad
Publicidad
Más
Publicidad
Publicidad
Publicidad

La París-Robuaix confirma una chicane para evitar el "riesgo de caídas"

AFP
La Trouée recientemente.
La Trouée recientemente.AFP
El director de la carrera, Thierry Gouvenou, ha declarado este miércoles a la AFP que el domingo en la París-Roubaix habrá una chicane a la entrada de la famosa trouée d'Arenberg para ralentizar el pelotón y evitar las caídas.

"Hemos recibido luz verde de la prefectura para validar el sistema previsto", dijo.

Después de cruzar la vía férrea, justo antes del tramo adoquinado, los corredores"rodearán la isla para acercarse a la brecha a una velocidad de unos 25 km/h", frente a más del doble de la velocidad habitual, añadió Gouvenou.

"A largo plazo, pensaremos en un sistema más fluido, pero dado el tiempo disponible, ésta era la mejor solución", añadió.

Esta chicane, justo a la entrada de este lugar estratégico y legendario de la reina de las clásicas, respondía a una petición del sindicato de corredores tras el terrible accidente del miércoles en A travers la Flandre. Varios corredores sufrieron fuertes caídas, entre ellos el belga Wout van Aert, que sufrió múltiples fracturas en una clavícula, siete costillas y un esternón.

En estos momentos, los corredoresestán bastante traumatizados", declaró Gouvenou el martes durante el reconocimiento de los adoquines. "Les escribí que (la chicane) podría causar problemas, sobre todo porque habría que frenar más. Me contestaron que preferían frenar fuerte y arriesgarse a chocar en el asfalto que entrar en la brecha de Arenberg a 65 km/h".

La Trouée d'Arenberg, de 2.300 metros de longitud, una zona estrictamente protegida y cerrada a los vehículos, es uno de los hitos más famosos de la París-Roubaix, donde muchos corredores han perdido toda esperanza de estrellarse en el pasado.