Bagnaia toca el cielo en Valencia y se convierte en el heredero de Rossi
Más de una década más tarde, un italiano se convierte en el rey del motociclismo. El último que lo consiguió fue Valentino Rossi, cuyo último gran éxito tuvo lugar en 2009. La dura oposición de Jorge Lorenzo y de Casey Stoner privaron al de Yamaha de sumar algunos títulos más, pero fue la posterior irrupción de Marc Márquez, ganador en seis ocasiones, lo que realmente frenó una exitosa trayectoria (antes venció durante un lustro de forma consecutiva, desde 2001 hasta 2005).
No fue una buena jornada la del sábado para Bagnaia, aunque suficiente para partir desde una posición que asegura puntos -con margen-. Terminó noveno la Q2, por detrás de su rival (cuarto), pero el francés necesitaba la excelencia a estas alturas, de modo que tampoco era un resultado especialmente bueno para él. Quien más rápido rodó fue Jorge Martín, cuyo tiempo fue inalcanzable para el mencionado Márquez (segundo) y el resto de perseguidores. Los españoles, en una situación inmejorable.
Fabio Quartararo, que ha perdido más de 100 puntos de ventaja desde verano, sabía que tenía que arriesgar este domingo (14:00 horas), sobre todo en la salida, para intentar adelantar posiciones y que eso pudiera poner nervioso a su oponente. Pecco, con muchos aliados, como ya se vio con Bastianini en el Gran Premio de Malasia, necesitaba únicamente sumar dos puntos y así poder ignorar la actuación del galo, obligado a encomendarse al espíritu de Alemania (ganó y el italiano se quedó a cero al no terminar).
Eclipsado triunfo de Rins
Álex Rins fue el mejor de la salida: pasó del quinto puesto al primero. Bagnaia tampoco lo hizo nada mal porque se colocó justo detrás de Quartararo, que protagonizó un intercambio de posiciones continuo con Miller. Instantes después, el francés llegó a contactar con Francesco en una acción limpia y sin consecuencias. Aleix Espargaró, con problemas técnicos, se retiró a falta de 24 vueltas, de modo que cierra el campeonato en cuarta posición. Su hermano Pol, Darryn Binder, Álex Márquez y Cal Crutchlow se cayeron al suelo minutos después del inicio.
Ante la atenta mirada de Fernando Alonso, que descansa este fin de semana, Marc retrató lo que ha sido su temporada y también abrazó el caliente asfalto de Cheste. Era cuarto, con muchas más opciones de podio que de ganar, pero tenía el objetivo de cerrar el campeonato con buenas sensaciones. Otro español, Maverick Viñales, se retiró cuando aún restaban más de 10 vueltas para el final. Entretanto, Rins y Martín marcaban el ritmo en la cabeza de carrera.
Bagnaia -terminó octavo-, que se lo tomó con más calma que nunca pese a la tensión de lo que tenía tan cerca, perdía posiciones de forma progresiva sin que le importara demasiado. Nunca antes había mostrado tan poca oposición cuando era adelantado, pero su prioridad no era otra que mantenerse sobre la moto. Quartararo, además, seguía en una quinta y retrasada posición, lo que convirtió la lucha por el Mundial en una jornada algo descafeinada. Pasó a ser cuarto con la caída de Miller, pero Rins casi empezaba a subirse al podio mientras Binder (Brad) adelantaba a Martín y el francés se despedía del Mundial.