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Sainz, encantado con la primera línea de Melbourne sólo dos semanas después de ser operado

AFP
Sainz habla con los medios tras la clasificación
Sainz habla con los medios tras la clasificaciónAFP
Carlos Sainz admitió el sábado que apenas podía creer que estuviera en la primera fila del Gran Premio de Australia sólo dos semanas después de su operación de apendicitis.

El piloto de Ferrari no pudo competir en Arabia Saudí porque tuvo que someterse a una operación de apendicitis y pasó los 10 días siguientes en recuperación.

El viernes regresó tímidamente para los primeros entrenamientos en Melbourne, inseguro de cómo su cuerpo soportaría las fuerzas de gravedad de las carreras a alta velocidad.

Pero perseveró y saldrá el domingo junto al campeón del mundo de Red Bull, Max Verstappen, incluso decepcionado por no haber logrado la pole position tras ser el más rápido en la Q1 y la Q2 de la clasificación.

"Casi no me lo creía, sobre todo después de lo duro que ha sido", dijo.

"Estoy muy contento de desafiar a los Red Bull este fin de semana. Ayer estuve un poco oxidado al principio, pero luego cogí velocidad y por fin pude encontrar el ritmo y sentirme bien con el coche. No voy a mentir, no estoy en mi estado más cómodo cuando conduzco ahí fuera, pero puedo hacerlo. Mucha incomodidad y sensaciones raras, pero no hay dolor, así que me permite empujar a tope".

Sainz fue tercero por detrás de Verstappen y del compañero del holandés en Red Bull, Sergio Pérez, en la carrera inaugural de la temporada en Baréin.

El piloto de Williams Alex Albon sufrió también una apendicitis en 2022 y Sainz lo buscó para pedirle consejos sobre qué esperar cuando regresara a las carreras. "Siento que es exactamente lo que Alex me dijo antes de subirse al coche cuando le extirparon el apéndice", dijo Sainz.

"Con la fuerza de la gravedad y todo, en el interior sólo se siente como si todo se moviera más de lo normal y necesitas un poco de confianza para bracear el núcleo y el cuerpo como estás acostumbrado a hacerlo, pero te acostumbras.

"No hay dolor, no hay nada de lo que preocuparse. Es sólo una sensación extraña a la que tienes que acostumbrarte mientras conduces. Especialmente en este circuito, estamos tirando de cinco a seis G en algunas zonas de frenada y curvas".

Sainz no puede dejar escapar ninguna oportunidad de mostrar su talento y profesionalidad, pues dejará Ferrari al final de la temporada para dar paso al siete veces campeón del mundo Lewis Hamilton, que abandonará Mercedes.