Omer Atzili fue el encargado de tumbar a la Juventus de Turín en el cuarto partido de la fase de grupos de la Champions. El jugador israelí marcó los dos goles de su equipo, hasta entonces con cero puntos, en una noche inolvidable para el Maccabi Haifa. Igualados a tres con la Vecchia Signora, necesitan al menos un empate para tener opciones de acceder a los dieciseisavos de final de la Europa League, aunque, en ese caso, los italianos tendrían que perder sus respectivos compromisos frente a Benfica y PSG.

El partido de este martes empezó fatal para los de Allegri, quien se mantiene en el cargo pese a los malos resultados -son octavos en la Serie A, diez puntos por detrás de la cabeza de la clasificación-. El primer tanto llegó en el minuto 7 y para ver el segundo ni siquiera hubo que esperar al descanso (42'). Los visitantes no fueron capaces de recortar distancias pese a tener sobre el terreno de juego a Vlahovic, Paredes o Di Maria, que se marchó lesionado.

El extremo de 29 años, internacional con la selección de su país, ha hecho carrera en Israel, a excepción de dos experiencias en el extranjero. Empezó en el Hapoel Rishon Lezion y de ahí se marchó al Beitar Jerusalem, desde donde llegó al Granada. Tras pasar por LaLiga, y antes de probar fortuna en el Apoel chipriota, Atzili firmó por el Maccabi Tel Aviv, previo paso a su equipo actual. Una trayectoria sin demasiado renombre en cuanto a clubes, aunque le ha permitido jugar en las tres competiciones europeas.

Once partidos en el Granada

Su nombre no estará en ninguna calle de la ciudad nazarí: apenas estuvo una temporada y pasó sin pena ni gloria por las filas del equipo andaluz (2016/17). Llegó a un Granada que entonces jugaba en Primera, aunque no evitó el descenso a LaLiga Smartbank (con 20 puntos, a 15 de la permanencia). Tan solo disputó 11 partidos (nueve en el campeonato regular y dos en la Copa del Rey) y no marcó ningún tanto. Este martes, en cambio, le metió dos al bicampeón de la Champions League.